De arquitectura de influencia neo mudéjar, el llamado Castillo Moro fue originalmente la residencia del empresario español Anastasio Herrero Vitoria y su esposa Rosa Díaz-Granados. Fue construido en el año 1930, diseño del arquitecto Gerardo Rovira de origen catalán  y del maestro de obras de origen croata Pasko Hilje. Para su construcción se importaron materiales de España e Italia, como azulejos, mosaicos, vitrales y yeserías. La estructura portante es de concreto armado, los muros de mampostería de ladrillo repellado y los pisos de mosaicos. Por su escala y detalle ornamental, destaca en el entorno urbano en el que se localiza, el barrio Amón de la ciudad de San José.

El Castillo Moro es una vivienda de dos pisos, su infraestructura incorpora elementos arabescos, como arcos de medio punto, decoraciones en los muros y ventanas, filigranas en relieve, cerámicas y mosaicos españoles. Además, posee una torre exterior con una cúpula de bronce y un patio interno como comedor central, rodeado de columnas y arcos, y una fuente en el medio. En su interior hay varios aposentos y habitaciones espaciosas con paredes de ladrillo repellado y alrededor de mil azulejos que representan distintas escenas de El Quijote de Miguel de Cervantes y varias reproducciones de pinturas de Francisco Goya, así como también los escudos de Costa Rica y España.

Declarado e Incorporado al Patrimonio Histórico Arquitectónico de Costa Rica, según Decreto Ejecutivo Nº 29042-C, publicado en La Gaceta Nº 214 del 8 de noviembre de 2000, de carácter privado, actualmente propiedad del empresario Jorge Ignacio Guier Acosta