Esta edificación en forma de torreón, de trece metros de altura,   se localiza en el centro de la ciudad de Heredia,  y se transformó con el tiempo en símbolo de la ciudad. Fue diseñado y mandado a construir por el Comandante de Plaza y Gobernador de la Provincia de Heredia, Fadrique Gutiérrez López , en el año de 1876.

Es en origen, una torre vigía de un cuartel militar que nunca llegó a ser finalizado. El fortín está dividido en tres partes claramente definidas. La estructura, realizada en ladrillo y calicanto consta de tres partes claramente diferenciadas, su base es de forma cuadrangular tiene seis metros de altura, y se remata con una cornisa en su parte superior achaflanada, con un corte oval en las esquinas.

Originalmente este cuerpo tenía tres puertas de acceso en las caras laterales, pero la sur en la actualidad está tapiada. Sobre la puerta se ubican dos juegos de troneras en dos filas, cuatro arriba y tres abajo colocadas de forma simétrica. La función de estas estrechas aberturas era la de asomar por ella cañones u otras armas de fuego para poder disparar con seguridad. Pero curiosamente en este caso las troneras están realizadas al contrario de lo habitual, con la parte más ancha hacia afuera.

No está claro si esta peculiaridad responde a alguna función que desconocemos o se trata de un simple error constructivo. El segundo cuerpo, es un cilindro de cinco metros de altura también con troneras. El tercero es el más pequeño, con dos metros de altura, y se separa de este por una doble cornisa octogonal. La estructura fue construida en el segundo y tercer nivel con mampostería de ladrillo; y calicanto en el primer nivel. Fue restaurada en 3 ocasiones, en 1967, en 1981 cuando se reforzó con un anillo de acero, y más recientemente en 2006

Fue declarado Monumento Nacional según decreto N°4256-C del 2 de noviembre de 1974. En setiembre de 1992 se le otorgó el título de “Símbolo del Cantón de Heredia”.