Historia

Don Eloy Alfaro en 1920 inició su fábrica de carretas en Sarchí y, el 18 de enero de 1928, don Juan Kümpeln le vendió gran parte de la maquinaria que tenía en La Hacienda La Eva. El ingenio de don Eloy permitió la instalación de un eficiente sistema de energía hidráulica que genera 12 caballos de fuerza, es abastecido por un rio aledaño llamado Trojas, que pone en movimiento toda la maquinaria pesada requerida en el taller.
Desde su fundación y hasta la fecha, la Fábrica Eloy Alfaro se caracteriza por su excelencia en el trabajo de forja de hierro necesaria para la elaboración de carretas, en especial para el herrado de las ruedas. Se puede decir que es una fábrica completa, porque aquí se le tornean los ejes, se le tornean las bocinas y se le hace todo lo que es el herraje. Esta es la única fábrica de carretas del país que ha trabajado y que se mantiene trabajando con energía hidráulica.
Misión

En palabras de don Eloy Alfaro “hacer las cosas de la mejor manera posible” aplicándolo en todas las áreas y enfocados principalmente en brindar un servicio que genere confianza en todos nuestros clientes.
Nos vemos en la obligación, por medio de la ya casi centenaria fábrica y lo que su historia representa, de darle vida por siempre para preservar  vivas las tradiciones que en un lugar como éste aún se mantienen y ser exponentes de parte de la cultura costarricense.
Visión
Hacer de este lugar un punto de visita casi obligatoria para el turista y así posicionarnos como la empresa de turismo de mayor crecimiento en la región, y de esta manera que la comunidad se vea beneficiada directamente en el ámbito económico y cultural, con nuevas fuentes de empleo y preservando lo que con tanto trabajo nos heredaron nuestros antepasados.
Datos curiosos
En los años de 1923 se construye en el taller la rueda hidráulica de madera, la cual es la encargada de hacer que funcione toda la maquinaria, luego en 1934 se sustituye por una hecha con estañones y es hasta 1965  cuando se instala una de hierro que es la que funciona hoy en día.
En Costa Rica las carretas tienen un apogeo en los años 40s y 50s, se utilizaban como ambulancia, carro de paseo, de trabajo. Se producían aproximadamente entre unas 2 carretas por semana a 10 por mes.
En aquel entonces la rueda de la carreta era hecha de una sola pieza, esto la hacía vulnerable ante los golpes y ante los cambios de clima, con el calor se ensanchaba mientras que con el frío tendía a encogerse, lo que provocaba inestabilidad de la carreta.
Don Daniel Alfaro quien era hermano del fundador de la fábrica, sugirió cambiar la manera de construir la rueda, la primera manera que intentaron cambiarla fue de 4 piezas, pero se producía cierto ensanchamiento con el cambio de temperatura, luego se hizo con 8 piezas hasta llegar a la versión actual que es de 16 piezas, en esta se obtiene estabilidad y el cambio en el tamaño de la rueda no afecta al ajustarse una con otra cada una de estas 16 piezas.
Entre las madera más usadas están el guachipelín, laurel, cristóbal y el caoba. Lo que se dura construyendo una carreta es una semana, aproximadamente unas 200 horas hombre.
La última remodelación fue en el 48, actualmente la fábrica está en funcionamiento con esa misma estructura. Patrimonio Cultural está realizando el proceso debido para declarar este taller como tal, por eso no se ha hecho ningún cambio.

Exclusividad

Dentro de los servicios que ofrece la fábrica es la construcción de carretas exclusivas de acuerdo al gusto del cliente, entre más detalles, más alto el precio. Los detalles van desde la forma y tamaño del cajón hasta tallar en la madera diferentes figuras. En la fábrica ce carretas Eloy Alfaro, se hace todo el proceso completo, iniciando con el trabajo con la madera, cortes, pulida, tallado, siguiendo con las partes en hierro como tornear los ejes y las bocinas,  llegando a la pintora folclórica de las ruedas, que de paso vale decir que cada zona tiene su trazo particular.</p>
Aquí se construyó la carreta más grande del mundo, la cual se encuentra exhibiéndose desde julio del 2006 en el parque de Sarchí. En los primeros meses de este año (2011) se le restauró toda la pintura y se le construyeron ruedas nuevas para sustituirlas por las que tenía.