Ruth Mora Corrales

Un día durante su permanecía en Estados Unidos encontró por casualidad un canal televisivo que estaba trasmitiendo un programa de manualidades, en este enseñaban a decorar piedras con pinturas, idea que se trajo hasta su hermoso pueblo Sarapiquí.

Al llegar al país recordó este programa y un día que necesitaba un regalo para una persona cercana se dispuso a emplear sus principales herramientas, su creatividad y capacidad para pintar paisajes y escenas de la vida cotidiana, conforme empezó a efectuarlos su fama se extendió y poco a poco emprendió esta aventura. Inicialmente realizaba únicamente sus trabajos con piedras, sin embargo, trasladarlas hasta las ferias o los lugares donde exponía su arte le resultaba difícil. De tal manera, después de reflexionar pensó en las jícaras como una opción más práctica, es así como sus trabajos actualmente los desarrolla con ambas materias primas. Asimismo, crea cuadros y utiliza desechos de madera.

La piedras las recolecta de los ríos cercanos, las imagenes que crea dependen de las formas y texturas de las mismas, entre las cuales se encuentran paisajes, animales e insectos, plantas, frutas, vegetales, personajes bíblicos, pesebres, entre otros.    

El Proceso

Mora, vecina de Río Frío y jefa de hogar, recordó que su aventura en el mundo del arte inició por los azares del destino. “Comencé un día que debía hacer un regalo y no tenía el dinero y entonces pinté en una piedra un venadito echado haciendo uso de mis habilidades; luego a mi mamá le preparé un gato. Eso bastó para que los vecinos y familiares preguntaran y me dijeran qué querían. Entonces vi un potencial en laborar eso”, reveló.

Su rutina se basa en la acumulación y selección de los materiales, muchos ella los encontró o bien se los regalaron personas allegadas. Posteriormente les halla una función o especie para que engalanen el hogar.

“Tomo las piedras de los ríos, de la calle o de cualquier lugar en donde las vea y si una me sirve me la llevo. Tienen que poseer algo especial, no todas sirven porque si son planas no se pueden realizar diseños como en tercera dimensión y si son porosas menos. Otras desde que uno las ve ya sabe el molde que llevarán”, aseguró.

En su taller como segundo paso las limpia, seca y les aplica una base de sellado color blanco. 

“Me encanta plasmar los animales, naturaleza o lo que me pidan las personas, puedo pintarles la mascota que se les ha muerto y quieren tenerla para recordarla. En las piedras tengo casas típicas, objetos navideños, para el Día del Niño, de la Madre, San Valentín; se pueden hacer diseños por época. Utilizo pintura acrílica con resina para que tenga un mejor acabado y durabilidad”, dijo. 

Sobre los portales comentó que la inspiran por tratarse de la llegada del Niño Jesús.

“Me parece que sí llevan un motivo más especial ya que es más espiritual. Las tonalidades las combino con total libertad, voy trazando sin presiones, normalmente trabajo todos los días unas 6 horas y cada piedra lleva un proceso original”

Fuente: Diario Extra. Disponible en: 

http://www.diarioextra.com/Noticia/detalle/277151/piedras-resurgen-en-a…. consultado 8 de noviembre del 2016.