Lorna Benavides

En su trabajo con la piedra, busca establecer un estrecho vínculo con el bloque siguiendo el espíritu fundamental de la talla directa. El trabajo con el material está influido por la respuesta que la piedra le va dando conforme avanzo en la labor sustractiva del desbaste y de la talla.

“Escuchar a la piedra” como aconsejaba Brancusi constituye un objetivo para ella, ya que conlleva el conocimiento del material, pero sobre todo, una actitud de respeto y de paciencia que considera indispensable para lograr un trabajo honesto.

Partiendo de nada en concreto, o bien de una vaga idea o estímulo, le gusta permitir ese diálogo incierto entre materia y pensamiento, y propiciar resultados muchas veces insospechados.

La variedad de materiales y la combinación de éstos entre sí conlleva también una variedad en los lenguajes y las intenciones. Busca provocar esa confrontación y observar cómo la materia se expresa en su propio lenguaje, y cómo el metal, la piedra y la madera aportan su dureza, su vitalidad y su eternidad, sugiriendo diferentes sensaciones táctiles y visuales en el observador.

Le estimula pensar que el material que trabajo desde un principio será luego el definitivo, y cree que esta característica le imprime enorme fuerza al resultado final. Es la satisfacción de procurarle al bloque en bruto su intencionada evolución hacia una forma significativa.