Corporación Artística Chocolate

En el año 2013, el maestro William Jiménez Araya, más conocido como "Kuko", toma la decisión de formar su propia compañía de baile, gracias al apoyo y solicitud de varios bailarines que ya habían trabajado con él en otros proyectos. Su experiencia como bailarín, coreógrafo y maestro, y su investigación sobre la relación entre la música y la danza de la cumbia y el swing criollo; le permitió aceptar el reto e iniciar con una pequeña agrupación de baile, con la que puedo poner en práctica sus investigaciones y conocimientos. Iniciando con apenas 8 bailarines, se presenta por primera vez el 08 de abril del 2013 en un evento del gobierno local de la provincia de Alajuela.

​Este pequeño grupo denominado en sus inicios como "Chocolate Dance Company", inicia sus ensayos en la Casa de la Cultura de Alajuela y proyecta su trabajo principalmente en eventos del gobierno local y en festivales folclóricos, con coreografías propias de William. Dentro de esta primera experiencia, Chocolate presenta el espectáculo "De las Vivencias a las tablas", en el Teatro Municipal de Alajuela, teniendo un éxito indiscutible y siendo invitados a participar con este espectáculo en el Festival Emilia Prieto Tugores, en el Ministerio de Cultura y Juventud de Costa Rica. A partir de este éxito William decide continuar con la agrupación y dirigirla hacia la proyección y difusión de la cultura costarricense por medio de la danza, llevando como baile especializado el Swing Criollo costarricense.

El desarrollo de su labor artística le permitió participar en espacios muy importantes como el Festival de la Luz, Teletón, y otros Festivales Nacionales, logrando posicionarse como una de las agrupaciones referentes del Swing Criollo en Costa Rica. En el 2014, tienen su primera gira internacional a Guayaquil, Ecuador en donde se destacan con su participación y calidad escénica.

​En el 2015, recibe la invitación para formar parte del Consejo Mundial de Danza en la UNESCO, convirtiéndose en la primera compañía costarricense en participar de manera activa en la generación de estrategias y planes para el desarrollo artístico mundial. Además para ese mismo año, se realizan dos giras internacionales a Hidalgo, México y Asunción, Paraguay obteniendo en esta última la designación de visitante cultural distinguido. Como parte de un proyecto de expansión territorial, llamado Embajadores del Swing, William decide abrir una compañía en San Carlos y otra en Limón, cambiando el nombre de la "Chocolate Dance Company" a "Corporación Artística Chocolate".

Para el año 2016, sigue expandiendo su trabajo con el proyecto Embajadores, abriendo nuevas compañías en San José y Santa Ana, convirtiéndose en la primera Corporación Artística de Costa Rica y llevando por primera vez el Swing Criollo a San Carlos y Limón, formando bailarines de la zona que luego proyectarán su trabajo en esos lugares. A partir de este año, William decide incorporar dentro de su repertorio artístico a los pueblos originarios, dando visibilidad a su valiosa herencia ancestral por medio de representaciones artísticas ligadas a creencias y cosmovisiones indígenas, cambiando así el logotipo de la Corporación Artística Chocolate al que conocemos hoy en día, que nace de un sello indígena costarricense.

Este crecimiento tan importante y el éxito de su proyecto les abre la oportunidad de viajar a México y Nicaragua en donde realizan clases magistrales para bailarines de danzas folclóricas y presentan ante las autoridades culturales mexicanas su modelo de gestión y trabajo organizacional, recibiendo el certificado de "Agrupación Cultural Emblema de éxito" e ingresa a la Asociación Mundial de Artes Escénicas como representante de Costa Rica ante esta organización.

​En el 2017, regresan a México mostrando nuevamente su trabajo escénico y refuerzan su labor cultural dentro del país con talleres abiertos para las comunidades y otras agrupaciones folclóricas; por otro lado William recibe la designación como Presidente Continental de América para la Asociación Mundial de Artes Escénicas, que lo lleva al reconocimiento continental de su trabajo y a crear alianzas internacionales para el desarrollo de la cultura continental. Para este momento, entre las coreografías más destacadas se encuentran "Tambora Gonin" una muestra de Swing Criollo, en donde se implementa una nueva forma de conteo en el montaje coreográfico lo que permitió una mejor interpretación musical y "Son a mi puerto", un bolero criollo que transforma la estructura del diseño coreográfico hacia la escena proyectiva.

En el 2018, viajan a Medellín, Colombia, ampliando las fronteras en donde presentan con éxito su espectáculo, teniendo como resultado de esta ardua labor cultural, la invitación a participar en el año 2019 del Campeonato Mundial de Folclor de la World Folk Vision en Riad, Arabia Saudita, en donde participaron de manera competitiva con más de 110 países de todo el mundo, obteniendo el lugar número 20 del ranking con la coreografía "Swing Solos", una propuesta coreográfica que se enfoca en el juego de pies, muy característico de la improvisación del Swing Criollo en los salones de baile costarricenses.

El desarrollo y consolidación de su propio programa de formación para bailarines y la ejecución exitosa de las investigaciones aplicadas a la música, llevaron a la Corporación Artística Chocolate a consolidarse como un referente del Swing y el Bolero Criollos en Costa Rica, y una de las mejores Compañías de baile costarricenses a nivel internacional, logrando en el 2020 y el 2021, poder llevar su espectáculo de manera virtual a Brasil, Argentina y Panamá; además de ser invitados a los programas virtuales de entretenimiento del Ministerio de Cultural y Juventud como parte de la medidas de mitigación de la pandemia.

​La Corporación Artística Chocolate, continua comprometida con la cultura costarricense y bajo la dirección de William Jiménez, siguen presentando sus espectáculos fuera de Costa Rica, llevando la cultural popular tradicional costarricense a todos los rincones del mundo.